El director de Randstad Research, Valentín Bote, y dos de los expertos jurídicos, Alfredo Aspra y Silvia Bauzá, valoran cómo está afectando la desaceleración económica y la incertidumbre política al funcionamiento del mercado de trabajo.
La falta de proyecto político está afectando a que exista una regulación laboral con una vocación de estabilidad y de dar cierta seguridad a distintos agentes, por lo que es imprescindible poder cerrar este capítulo para que compañías, inversores y emprendedores se desarrollen en un panorama con cierta seguridad.
Por tanto, nos encontramos en un momento de indefinición: la dificultad de tener que aplicar normas que se han formulado en forma de decretos leyes, así como de forma muy precipitada y con una técnica no lo suficientemente desacelerada, y que afectan a cuestiones importantes que tienen que ver con el día a día de las empresas.
En estos momentos, la incertidumbre política no siempre permite dar un asesoramiento concreto, lo que conlleva a generar inseguridad jurídica.
“La regulación actualmente para el siglo XXI parece diseñada para el siglo XIX” , afirma el director de Randstad Research, Valentín Bote.
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